“Al Señor Miyazaki no le interesan las historias, sí la expresividad”

¡Hola a todos! Hoy les contare una anécdota del señor Hayao Miyazaki, conocido alrededor del mundo por obras de animación tales como “Nausicaä del Valle del Viento”, “Mi Vecino Totoro”, “Princesa Mononoke” y otras tantas películas exitosas.

En otra ocasión les hablaré del proceso de creación del animé (animación japonesa) en general, pero hoy les hablaré en particular del proceso llevado a cabo por el Sr. Hayao Miyazaki para crear sus historias.

Normalmente, tanto las películas con actores de carne y hueso como las películas de animación se filman de acuerdo al guión preparado por el guionista. Todo movimiento, todo diálogo se realiza de acuerdo al guión.

¡Pero! Según parece, el Sr. Hayao Miyazaki acostumbra cambiar la historia de sus películas de acuerdo a lo ya animado. A la hora de crear sus historias, el conecta las situaciones e imágenes maravillosas ya elaboradas con lo que pase por su mente en ese momento.

Una persona involucrada en el mundo de la animación comenta que “cuando Hayao Miyazaki ve una película, solamente se concentra en la expresividad de esta”. Hayao Miyazaki no ve una película de principio a fin, sino que la ve a partir de la mitad, y una vez que ya haya visto un poco cambia de película, para después volver a cambiarla, y así… Se cree que de esta manera Hayao Miyazaki ha visto más de 1000 películas distintas.

Ahora bien, ¿por qué lo hace? Se debe a que él no se concentra en la historia, sino más bien en la expresividad de la película en sí. Las películas del Estudio Ghibli han sido trasmitidas numerosas veces en la televisión japonesa, pero los japoneses no se cansan de verlas por la alta expresividad que estas poseen. Esto no quiere decir que las historias sean malas, para nada.

Como no hay guion, el staff trabaja sin saber cómo la historia terminará. Hayao Miyazaki es el único que lo sabe. ¡Qué va, es mentira! Kkkk

Por ejemplo, en la película “El Castillo Errante de Howl”, la historia va por todo tipo de aristas (eso sí, sin dejar de ser entretenida), pero existe una anécdota en donde un miembro del staff que estuvo involucrado en la producción de la misma llegó a preguntar una vez a Hayao Miyazaki “¿Esto terminará como se debe?”.

A esto, Hayao Miyazaki respondió “Si, lo hará. Todo está bien.”. Sin embargo, con el guión casi terminado y faltando treinta minutos de película, se comenta que Miyazaki se apersonó ante los animadores y les dijo “¡No consigo terminar la historia, que voy a hacer!

¡Que situación, eh! Kk

Fue ahí que el animador de quien hablábamos antes sugirió a Miyazaki “¿Y si volvemos a reunirlos a todos?”. A eso, Miyazaki dijo “Sí. ¡Eso es!” y regresó a su oficina. Con esto, la película por fin tuvo su final como se merecía.